Maceió |
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Situada entre la Laguna de Mundaú y el Océano Atlántico, la capital del estado de Alagoas, comunicada con todas las ciudades del litoral por la carretera BR-101, tiene algunas de las más hermosas playas del Nordeste, muchas con piscinas naturales. Este escenario paradisíaco se complementa con lagunas, cocoteros y una rica y sabrosa cocina a base de mariscos, cuscús y tapioca. Las playas más
frecuentadas por los turistas son las de Coruripe, Barra de São Miguel y do
Francês, en Marechal Deodoro, municipio a 21 kilómetros de Maceió, donde
nació el primer presidente de Brasil, el mariscal Deodoro da Fonseca. |
Al sur, la ciudad tiene como atracción las playas da Avenida, Sobral, Trapiche y Pontal da Barra, todas con acceso a lagunas. Cerca de las lagunas de Mundaú y Manguaba se formaron las villas de pescadores recortadas por canales navegables que concentran gran cantidad de moluscos y crustáceos. En algunos lugares, las playas forman lagos a dos kilómetros del litoral, constituyendo una excelente opción para bañarse en el mar y hacer excursiones en jangada (especie de balsa para pesca típica del Nordeste de Brasil). |
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La
más conocida es la que sale de la playa de Pajuçara y lleva a los
turistas de paseo por las lagunas formadas por arrecifes de coral y bancos
de arena que surgen cuando la marea está baja. Algunas jangadas han sido
transformadas en bares, donde el turista encuentra comidas típicas. A 6
km de Maceió, se encuentra la playa de Jatiúca, paraíso de los
surfistas y bien equipada con albergues y hoteles. Además de playas, Maceió tiene como atractivo edificios de siglos pasados, entre los cuales destacan la Catedral de Nossa Senhora dos Prazeres, de 1840; el Teatro Deodoro, el Mercado Municipal, el Museo del Instituto Histórico y el Palacio Floriano Peixoto, sede del gobierno estatal. |